Definición: Relativismo es todo un sistema de pensamiento que afirma que no existen verdades universalmente validas, ya que toda afirmación depende de las condiciones de la persona o grupo que la afirma.

 

Nuestra sociedad individualista nos empuja, que primero tú, después tú y hasta el último tú. Es una sociedad de jóvenes enfocados en el placer, lo fácil, la ley del menor esfuerzo. Todo lo queremos a la mano, todo lo queremos automatizado y de inmediato.

 

La vida que desean los jóvenes, es una vida sin compromisos, sin responsabilidades y sin rendirle cuentas a nadie. El mundo señala que es normal vivir así, que es un derecho. Para el mundo una vida sin Dios es relativamente normal.

 

Hoy veremos lo que la Biblia nos dice acerca de dos cuestiones fundamentales para nosotros como jóvenes: relativismo y verdades absolutas.

 

La existencia de Dios es relativa para el mundo. La ciencia dice que no se puede comprobar que Dios exista, pero tú y yo creemos que Dios es cuestión de Fe y certeza y no precisamente cuestión de ciencia.

 

El relativismo es una figura de mediocridad y tibieza.

 

No te gusta comprometerte en casi nada. Puedes llegar a pensar pues no le hago mal a nadie, no soy malo, soy relativamente correcto. Qué dice Dios acerca de la tibieza.

 

Ejemplos:

Mediocre en la iglesia, no te comprometes, eres inconstante, de doble animo.

 

Tienes mucho potencial, dones, talentos y no los pones al servicio del Señor. Prefieres hacer tu voluntad. Eres un holgazán en tu casa, no te dedicas a nada, no ayudas, no recoges nada de tu cuarto.

 

La homosexualidad en la actualidad es diversidad, mente abierta, amplio criterio. Vivir así no es mente abierta, es pecado. Dios creo hombre-mujer, pero nunca un estado intermedio para experimentar.

 

Fornicación (relaciones sexuales antes del matrimonio) es relativamente normal para esta generación de jóvenes. Entre más experimentes, podrás tomar una mejor decisión para encontrar pareja. Falso. Dios tiene una pareja para ti, y no tienes que estar probando. La consecuencia puede ser un embarazo o el sida.

 

 

En la actualidad cada quien hace lo que bien le parece.

Para nosotros como jóvenes, el que no hubiera rey en Israel representa que Dios no es el dueño de nuestro corazón.

 

Vives para ti, o vives para Dios. Estas en la iglesia para servir a Dios o para que la iglesia te sirva a ti.

 

 

Cuando vives una vida relativa, a medias, te vas a estancar en tu comunión espiritual.

Para conocer a Dios debe haber anhelo y pasión por su palabra.

La palabra de Dios te guía, te dirige e instruye.

 

Si desechas los consejos de la Biblia, vivirás relativamente bien, pero alejado de la voluntad de Dios.

Para llegar a conocerlo, tienes que buscarlo, escucharlo y poner en práctica sus consejos.

 

Aunque el mundo diga lo contrario, Jesús es la única fuente de salvación.

De Jesús proviene la única provisión de la verdad.

Cristo es la verdad absoluta y lo único (jóvenes) que necesitan para vivir libres.

El mundo te dice: no hay verdad en Dios. La Biblia dice acerca de Dios:

La verdad de Dios no puede ser quebrantada, no puede ser conmovida, no puede ser cuestionada. Es cuestión de Fe, de creer y creerle a Él.

 

Una verdad absoluta como jóvenes es que Dios, ya nos había escogido, ya nos había apartado. Nos había adquirido (nos compró y ahora le pertenecemos).

 

Tenemos un llamado muy especial. En medio de una generación que no busca a Dios, nosotros debemos ser luz en medio de las tinieblas.

 

No podemos fallar, no podemos ser relativamente cristianos o apasionados. Tenemos que impactar a nuestra generación y ser parte del cambio.

 

Fuimos creados para adorar y para proclamar.

En la iglesia somos formados en carácter, somos habilitados para adorar su nombre y amar su presencia. Somos provistos de las herramientas espirituales.

 

Fuera de la iglesia proclamamos su nombre, predicamos de su palabra, influenciamos a los demás a seguir a Cristo de una manera radical. Debemos vivir como jóvenes que no se dejan deslumbrar por lo que el mundo nos pueda ofrecer.

 

Hay un canto de Delirious, que se llama “history maker”-hacedores de historias. Y dice: yo quiero ser, quien cambie la historia en mi país.

 

 

Yo te he puesto: en la iglesia con un liderazgo de jóvenes, en la alabanza, como líder de células, o te está preparando para ello.

 

Yo te he puesto: en un trabajo para que seas diferente, en la universidad para ser ejemplo en todo, en el hogar para mostrar obediencia y amor fraternal.

 

Para mostrar en ti mi poder. Dios quiere hacer grandes cosas en tu vida. Cada vez que lees en la Biblia que Dios mostraba su poder en alguien, la potencia y el poder de Dios eran evidentes.

 

Jóvenes poderosos en el entendimiento de la Biblia, poderosos en una vida de oración. Poderosos en la comunión con el Espíritu Santo.

 

 

 

En una vida llena de verdades absolutas sustentadas en la palabra de Dios no hay lugar para el pecado.

 

Santidad en la forma de hablar

 

¿Queremos que nuestra vida refleje tibieza o pasión por Dios?

¿Que queremos reflejar?

¿Cómo hemos vivido?

 

“Canto Resplandece”